jueves, 24 de diciembre de 2009

EDUARDO LANGAGNE (MÉXICO, 1952 )

Ropa blanca


como a la ropa blanca
la vida mí
me va a lucir


ma ha de lavar
y consentir


me va a arrugar
y percudir


me va a rasgar
me va a huir


a desechar
y a sustituir






Cuando ha muerto alguno




No importa si no lloras cuando ha muerto alguno
que poco conocías.Todo se olvida.Todo.








No ocurre nada más




Oigo al cielo gemir en esta tarde oscura
en la que el viento gime y es todo lo que hay.
No ocurre nada más.El viento está pidiendo
a la tarde que acabe repentina y oscura
como el plomo.Y el toro en su constelación
hace al viento gemir y el cielo también gime.



de Cantos para una exposición,Editorial Joaquín Mortiz,México,1995

domingo, 20 de diciembre de 2009

AMELIA BIAGIONI (ARGENTINA,1912 - 2000)




Decir


1


Donde más digo menos digo.
Y si porfío sin cambiar de elán o polo o centro
enrosco ablando borro lo ya dicho.
Porque decir es un rayo y su sombra.


2


Tengo una herida siempre verde
que reconoce el filo
del nombre oculto en la neblina.


3


Cuando recibo una palabra inesperada
la retengo y vigilo sus diferentes porvenires
hasta que alguno de ellos
de pronto se recuerda se incorpora
y no hay palabra ya
sino un gran viento que me empuña.


4


Quisiera ensayar
el paso de lis
del fuego que sube al espíritu.


5


Persiguiéndome por los ríos
espero alcanzarme en el mar
y encontrar en mi infancia
un dios irresistible
un sonido que abra y cierre a los otros
como un nocturno barco surcando un arpa.


6


Quisiera decir la pasión
aterradora del universo de la noche,
su ardiente abrazo que abandona.


de,las cacerías,editorial sudamericana,buenos aires,1976

martes, 8 de diciembre de 2009

RICARDO SILVA - SANTISTEBAN ( LIMA , 1941 )




AMOR ENTRE LOS ASTROS


Soy guiado por el sol
con la leyenda de los años en mi pecho,
me une la visión que coge mi sonrisa
ya sea que tome oro en las colinas,
polvo de estrellas
o la visión que aprieta mi recuerdo
donde,con yerbas y flores,
la fosa de tierra natural
abra sus mejillas como flores.

¿Quién sigue mis pisadas
en la cálida tierra?
¿quién cabalga sobre mares y espumas?

Mi propio rostro roza estas visiones,
mi propio rostro o cuerpo emerge
sobre las alas de los ángeles
en ningún abismo,
en el fin de su día de estío
y en la tumba que cubre su ceniza.
La leyenda de que hablo
puede tomarse al tacto de las peperonias
o de la cabellera de un niño dormido,
o cuando se cava la tierra con las manos desnudas.
Yo,tú, tú yo,
                 sol luna, luna sol.
Cubro,cojo la yerba con que mi sueño
hila su tela unido con el tuyo.
Tu piel,mi piel,una sola,
un desgarramiento
                           y la unión entre los astros.




PRESENTIMIENTO




Luego de la luz es amarga la sombra,
el mar hace ondular los blancos cabellos;
no he de temer esta noche mi congoja
así venga desde un mar ya lejano.



MUERTE



No es el derecho a la muerte lo privado,
ni el derecho a la vida lo secreto:

los hombres,las mujeres,
las inútiles palabras de los vivos
alientan en la sombra de los muertos,
de los que agonizan
                             en el lecho perverso
tendido antes
                    de la amarga victoria de la muerte.

Sus áureos cabellos,su sombra dorada,
los dorados miembros,las facciones doradas,
y sus áureos pensamientos
hundidos en lo profundo de las lágrimas.

Palabras entre palabras susurradas en la sombra,
y su gemido mutilado entre silencios;
un ronquido rebajado a la súbita apariencia,
a lo tenue y sutil
que significa lo perdido,
                                  lo no ganado nunca,
al perfume de las flores aspiradas
en el verde campo donde asoma el paraíso :

todo lo áureo de su huella hundido en lo pútrido del
       tiempo.

de,Sílabas de palabra humana,según la versión contenida en,Terra Incognita- Poemas 1965-1988,Mosca Azul Editores,Lima 1989.