domingo, 25 de abril de 2010

POESÍA QUECHUA




YO CRIO UNA MOSCA DE ORO


Yo crío una mosca 
de alas de oro,
yo crío una mosca
de ojos encendidos.

Trae la muerte
en sus ojos de fuego
trae la muerte
en sus cabellos de oro,
en sus alas hermosas.

En una botella verde
yo la crío;
nadie sabe
nadie sabe
si come.

Vaga en las noches 
como una estrella,
hiere mortalmente
con su resplandor rojo
con sus ojos de fuego.

En sus ojos de fuego
lleva el amor,
fulgura en la noche
su sangre,
el amor que trae en el corazón.

Nocturno insecto,
mosca portadora de la muerte,
en una botella verde
yo la crío,
amándola tanto.

Pero ¡eso sí!
¡Eso sí!
Nadie sabe
si le doy de beber,
si le doy de comer.

(recogido de la tradición oral por José María Arguedas)


de Poesía quechua.La bárbara tristeza.Editorial Leviatán.Buenos Aires.1997


lunes, 5 de abril de 2010

Roberto Juarroz ( Coronel Dorrego,1925-1995)



 15


Buscar una cosa
es siempre encontrar otra.
Así,para hallar algo
hay que buscar lo que no es.

Buscar el pájaro para encontrar a la rosa,
buscar el amor para hallar el exilio,
buscar la nada para descubrir un hombre,
ir hacia atrás para ir hacia adelante.

La clave del camino,
más que en sus bifurcaciones,
sus sospechoso comienzo
o su dudoso final,
está en el cáustico humor
de su doble sentido.

Siempre se llega,
pero a otra parte.

Todo pasa.
Pero a la inversa.



16


Cuando carezco de luz
la luz me parece imposible.

Cuando quedo afuera del poema
el poema me parece imposible.

Cuando  dejo de mirarte
tú me pareces imposible.

Cuando pierda la vida,
la vida me parecerá imposible.

Y si pudiera no pensar,
pensar me parecería imposible.

Desde afuera de una cosa,
esa cosa es imposible.

Y desde afuera de todo,
todo es imposible.

Pero hay una excepción:
desde adentro de mí,
yo también soy imposible.

de Duodécima poesía vertical (1991) según la versión que consta en Poesía Vertical 1983/1993,Emecé,Buenos Aires,1993